LA SANACION POR LOS CHAKRAS

Una gentileza de la Web www.eternidad2.com

CHAKRA es una palabra sánscrita cuyo

 significado es «Rueda». Los diferentes cuerpos

 que forman parte del ser humano, desde al más

 den­so al más sutil, se ven afectados por las

 distintas energías que irradian los Chakras.

 

Bien es verdad que no es éste uno de los te mas que más inquiete al gran público, talvez por la poca difusión en revistas especializadas, escribir sobre los Chakras, conlleva inevitablemen­te el «riesgo» de la incredulidad, ello es por que en general (toda generalización comporta alguna injusticia), las personas que tan sólo siente curiosidad e incluso un moderado interés por estos te­mas, ni tan siquiera conocen técnicamente los mecanismos de estos centros «energéticos», yen algunos casos ni saben de que se trata.

 

Para asumir la existencia de estos centros «de energías», se debe haber llegado al convencimien­to de que el ser humano dispone de cuerpos suti­les además del físico, de no ser así, mejor será, amigo lector! Que pases estas páginas sin tan siquiera mirarlas.

 

Sin embargo, veremos la gran utilidad que pueden ofrecer a todas aquellas personas que se ocupen y «preocupen» por someter al individuo a las múlti­ples ventajas que pueden propiciar, tanto al cuerpo físico como al etéreo.

 

CHAKRA es una palabra sánscrita cuyo significa­do es «Rueda». En lengua Pali se denomina Chakka. En general, los fisiólogos, han centrado su atención en el cuerpo físico, pero se han olvidado o, «no conocen» esa otra materia <<física>> pero invisible que forma el cuerpo etéreo, es cierto que aparentemente, sólo en el cuerpo físico. Esta <<materia>> manifiesta su expresión. Si profundizamos en el tema, veremos que realmente es esa  <<materia>>etérea la que tiene un cuerpo físico y no al revés, siendo el físico un burdo espejo’ del refinado desenvolvimiento y funcionalidad  del  cue­rpo etéreo, con todos sus «componentes.

 

Las limitaciones de este trabajo impiden el hacer una exposición más amplia y completa sobre las extraordinarias particularidades de los chakras cada uno de los cuales están formados por una serie de radios energéticos por los que discurren corrientes de energía a distintas velocidades vibratorias, aprovechando esta circunstancia podemos conseguir unos benéficos logros.

 

El cuerpo etéreo dispone de siete Chakras que, para utilizar un lenguaje accesible se podría equiparar a los centros nerviosos de nuestro cuerpo físico, éstos se dividen en tres grupos, inferior, medio, y superior, equivalentes a: fisiológico, b: personal, c: espiritual.

 

Por estos centros energéticos, fluye una corriente de energía que sé interoceánica con los otros dos cuerpos del hombre, estando sus efectos en fun­ción del estado «evolutivo» del individuo, se po­dría decir que las partículas desprendidas por las emociones, estados anímicos, limpieza de pensamiento y honesta conducta, buscan a otras partículas

 

 

Afines en el cuerno etéreo potenciándose mutuamente e impregnándose unas de otras esta­bleciéndose una conexión entre los tres cuerpos con sus repercusiones benefactoras para el físico, armonizando todas las «energías» destinadas a equilibrar el comportamiento vibraciones de es­tas. (Sólo lo superior puede mejorar lo inferior).

 

Muy acertadamente expone la doctora Besana:

«Hemos visto que el deseo tiene dos capitales ex­presiones, atracción para poseer o ponerse en con­tacto con el objeto que de antemano proporcionó placer, y repulsión para rechazar o eludir el contacto con un objeto que previamente infli­gió dolor. Hemos visto que la atrac­ción y la repulsión son dos modalida­des del deseo que domina ci Yo. Cómo la emoción es el deseo entre­mezclado con el in­telecto, inevitable­mente ha de ofre­cer la misma divi­sión en dos moda­lidades. Se llama amor la emoción de índole atractiva que placenteramente medos objetos. Es la energía integran­te del Universo. Se llama odio la emoción de ín­dole repulsiva que dolorosamente separa dos ob­jetos. Es la energía de siente gran té del Universo. Ta­les son los dos trances de la raíz del deseo y de ellos arranca, como ramas todas las emociones.

 

Los Chakras, generalmente, están en estado la­tente, pero «dormidos» o por mejor decir, enclaustrados en una especie de circuito cerrado, «energías prisioneras» por falta de corrientes afi­nes con capacidad para hacer de «hilo conductor» de aquellas. Demasiada luz en medio de las penumbras de la grosería y la vulgaridad.

 

La corriente vital de los Chacras, se comuni­can de uno a otro vivificando y manteniendo en movimiento todas las energías que absorben sus radios, estas corrientes adquieren distintas coloraciones correspondiendo cada una de ella a aspectos morales, espirituales etc, del individuo.

 

Toda persona que haya alcanzado el estado pro­picio puede sanar utilizando los Chakras como «portadores» e irrigadores de energía que el «emi­sor» transmita a la parte afectada en el «paciente».­

 

 

 

Cada Chakra, ac­túa en una parte determinada del cuerpo pero, es necesario un co­nocimiento pro­fundo de la in­fluencia de estos en los distintos Centros nerviosos del cuerpo físico.

 

A buen seguro que conoces, amigo lector! A alguien que ha­biéndose encon­trado físicamente mal, los médicos no han podido de­terminar el origen de su estado, a pesar de que los estos: dolores con­ causa justificada, enorme cansancio al levantarse por la medicina, reiterativas, poco apetito, vómitos etc, a pesar de todas las pruebas efectuadas por la medi­cina tradicional, nada ha justificado todos estos síntomas. ¿Que es lo que ocurre?..

 

Sencillamente, que esos síntoma son efectos de una causa que no está en el cuerpo físico, sino en el etéreo. Efectivamente muchas de las dolencias que aquejan a la humanidad, tienen su origen en el cuerpo etéreo, siendo por tanto, inlocalizable para el ojo pragmático del galeno y también para los «sofisticado» elementos clínicos que hoy apoya a la medicina.

 

Los diferentes cuerpos desde al mas densas al más sutil, se ven afectados por las distintas energías que irradian los Chakras, son partículas de energía sutilisima se ha que ha de estar en equilibrio con otras que inciden únicamente en el cuerpo físico com­puestas por partículas provenientes del exterior cuyas vibraciones son más lentas. Ambas energía as debe de buscar un equilibrio vibración al, que, sin que interfieran las unas cii las otras armonicen y se intepenetren absorbiendo dinamismo vital.

 

Si estas energías, se desequilibran por razones físicas. Anímicas, morales, o espirituales, sé pro­duce una especie de corte del flui­do dc algunos de los Chakras que a su vez tendrá incidencia en el ámbito de in­fluenciada dicho Chakra.

 

También puede ocurrir, que se haga necesaria la estimulación de alguno de los Chakras para reactivarlo y su circulo de influen­cia se haga más «denso». Existen varios procedi­mientos, quizás la más rápida y directa sea me­diantelatransmisi6n de energía por la imposición de la ¡rano al punto vital, para poder hacer de emisor, es necesario conocer lo que se intenta conseguir, así como los mecanismos que actúan en cada momento.

 

El emisor debe de haber aprendido a hacer de re­ceptor y acumulador de energías, así como conocer la formula para transmutadas en positivas. Todo individuo es «bombardeado» por millones de partículas transportadas por los rayos solares y depositados en nuestra atmósfera, esas partículas deben ser «almacenadas», para cuando sea preci­so el utilizarlas en beneficio de un congénere, por supuesto el emisor debe haber aprendido a canali­zar esa transmutada energía para poder proyec­tarla al lugar indicado así como conocer que parte del cuerpo debe de ser el objeto de la transmisión en función de la parte doliente así como el que se trate de física. Psíquica, anímica o de otra índole.

 

Pero, no es tan sencillo, si bien es cierto que todos podemos realizarlo, es necesario haber alcanzado un estado que te permita sentirte realmente bien con lo que haces, ser altruista, y pensando que tu mejor recompensa la recibes cuando el paciente mejor de su dolencia, esa debe de ser una satisfacción «impagable».

 

Es importante someter al paciente a la técnica propias que cada caso requiera. Relación en 1o2 grado, hipnosis -por inducción- descarga de sus tensiones y energía negativa, estímulos mentales para conseguir el estado apropiado ante de la transmisión.

 

La curación por estimulación de los chakras, es extremadamente antigua y la herramienta de la mano ha sido utilizada por distintos personajes a lo largo de la historia, hoy en día es utilizada – aunque no siempre correctamente- por muchos curanderos o sanadores. 

                       

 

Es evidente que los distintos cuerpos del ser humano deben de «convivir» en armonía para que no se produzca un desajuste entre las corrientes fluidicas de energía que cada uno genera.

 

El primer Chakra, es el foco llamado Kundalini o fuego serpentino, situado en la parte inferior de k comuna dorsal, este fuego serpentino existe en todos los planos. Mediante la estimulación de Kundalini se puede ir despertando todos los de mis Chakras, aunque el Kundalini, posee una

 

 

 

fuerza extraordinaria que puede elevar al individuo hasta lo más alto o pude asimismo sumergirlo en lo más profundo. Por ello, no se debe intentar su despertar completo si no se está debidamente pre­parado, a pesar de que en ocasiones se despierta, espontánea o accidentalmente, provocando serios problemas en el ser humano, el despertaren algu­nas personas de esta energía ha provocado, expe­rimentación de fenómenos paranormales, sueños premonitorios, videncia etc., en otros ha sido todo lo contrario, los ha sometido a toda clase de vi­cios acabando con su vida lentamente. Emocional del individuo, cuando se produce el alu­dido desajuste entre el físico y el etéreo surgen síntomas o efectos que se manifiestan, pero cuya causa generalmente permanece oculta, llegando a hacerse una patología «crónica».

 

El tema da para mucho más pero sirvan este esbo­zo sobre los Chakras para «alertar» sobre las po­sibilidades que ofrecen para la «restauración» del equilibrio arménico en el funcionamiento de to­dos nuestras energías «invisibles» reguladoras de los diferentes cuernos que poseemos.

Como decíamos este núcleo energético pueden utilizarse para la sanción y estabilidad psíquica.

Y seguiremos